De atléticos a indios y colchoneros, pasando por atletistas

"Y usted, no pise ese Escudo..."
Luis, presidente de honor

viernes, 26 de marzo de 2010

Al chupe

Mi querido y devaluado sentimentalmente Diego Forlán:

No me siento en el Fondo Norte, pero ayer si me sentí tan ofendido como cualquiera que allá ocupe localidá. Lo que digan las teles hoy, con sus micro-tomas y análisis labiales, como que ya me la suda un poco. Porque, lo que dijo, y el gesto de lo que dijo, no me dá buena espina como aficionado. Y usté, lo quiso decir, como quiso que se le oyera bien clarito, que pa sacar las faltas y otras cosas de banquillo, bien que se ponen la zarpa sobre el boquío, pa que no se entere ni el tato. Esperaba su particular “venganza”, y creyó que aquél era el momento idóneo. Perfecto. El Fútbol es una sucesión de venganzas y afrentas. ¿Aguardamos ahora el “contragolpe” de los aficionados silbantes al próximo partido-pufo?. ¿Queremos que esto acabe como el rosario de la Aurora…?

Desconozco a ciencia cierta el motivo que, de un tiempo a esta parte, detecto ha venido creciendo en usté como para estar peleado con el mundo atlético. Podría ser aquella venta frustrada en el verano, hacia otros pagos de más “grandeza”. Podría circunscribirse también a aquella recepción de la Bota de Oro, inaudita por no acudir a ella prácticamente nadie representativo del estamento de la SAD. Podría haber radicalizado su compañerismo, por anteriores pitos a colegas de vestuario suyos, que ya recriminó en su momento. Podría centrarse en aquella subidita de sueldo que no terminaba de producirse… Podrían ser muchas cosas, y solo usté conocerá sus motivos. Ahora bien, convendría centrar las dianas, porque lo demás no nos lleva más que a confusión y desorden. Aspectos, por otra parte, muy habituales en esta SAD; pero que no por ser práctica habitual de sus apropiadores indebidos y consortes, deben de tomarse como bandera para dialogar con la afición. Al menos, con una parte de la afición que le respeta y valora, pero detecta ha venido sufriendo un vertiginoso cambio de la anterior temporada a esta. Y no hablamos de goles que, de eso, ya tenemos muchos pichichis y goleadores vistos pa desconocer cómo va el paño. No, se trata de actitud. O al menos, así parece a una sección más o menos amplia del Calderón. Muchos callan ahora, cuando hace apenas unos meses henchían vena en el gaznate, vociferando “uruguasho, uruguasho”, bufanda en ristre. Son gente que ha cambiado su punto de vista sobre uno de los suyos. Medite el por qué.

Porque, mi querido y devaluado sentimentalmente Diego Forlán, si usté está por pensar que es lindo que Florentino le pretenda hay otros, en otro lao de la tiza, que pensamos que sería muy lindo joder al señor de Mordor. Eso, sí que es histórico.
Entonces, como a día de hoy el ejército es el que es, y usté está donde está, ¿qué le parece darnos un pequeño gran homenaje a su costa?. ¿Y dedicárselo a esos niños, adolescentes y hasta juveniles que no tienen conciencia aún de lo que es pasarse por la piedra al “querido” vecinito?.

No sea bobo, caballero. Aquí somos del Atleti y, mientras sintamos que al Atleti lo defienden bien sus soldados, estaremos con ellos. Son nuestra prolongación en la cancha. Represéntennos. Porque, al fin y al cabo, se trata de eso. Y, disculpe en cualquier caso la inmadurez que un servidor siente entre sus congéneres. Dese cuenta que venimos de un secuestro prescrito, una nefasta gestión, un saco de actores de medio pelo, venta de humo lacrimógeno a granel y un sinfín de obscenidades que han hecho de un Club orgulloso y vencedor, poco menos que un coto de torrentes y comparsillas. Represente, al menos, a esa parte de seguidores que no se conforman con tifar colateralmente por el Barça. Que se acuerdan del Atleti…

A cambio, les permitimos una vida holgada. A ustedes, e incluso en algún caso a sus hijos y nietos. Además, les damos algunos momentos “Warhol” de vinos, ovaciones y rosas, que ninguno de nosotros disfrutaremos en nuestra vida.

Un devaluado saludo con ganas de revalorizarse, tras un “SIEMPRE ATLETI”

martes, 16 de marzo de 2010

No tengan prisa

Una imagen, vale más que mil palabras. O eso dicen. Así es que, una mañana cualquiera de marzo, Vicente se pega un homenaje de imágenes en la página digital del “as”. Viene con letras, también. Pero lo que más importa en estos tiempos, es la imagen. En singular. En realidá, les viene importando desde lejos, cuando gustaban de colocar un poster a todo color en las páginas centrales, como reclamo a la clientela. En la era de la imprenta, en temporadas que se escribían con otras firmas.

Como primera providencia, publicidá. Mucha publicidá. A la cual se deben en gran medida, pues supone un capital porcentaje en su fuente de ingresos. Y a ella suelen rendir pleitesía, como a los presis que les conceden entrevistas, les dan la exclusiva de un fichaje, les regalan una campaña de sudaderas o les dejan a los chicos-estrella en entrevistas en praim-taim de ese. Lo que no piensan, lo que no pensamos, es que ese becerro de oro llamado “anunciantes” no sería un puñetero piojo si allí no acudieran en masa cientos de miles de aficionados deseosos de conocer la última noticia de su club o SAD, y validaran con su multitudinaria presencia el pastón que los anunciantes desembolsan a los del medio en cuestión. Ergo, todas las marcas que allí aparecen no son más que una prolongación de la pasta del usuario-deportivo, solo que negocian desde sus siglas porque el 1+1 se ha perdido en su bolsillo. Además, así su interlocutor no se hace líos con tantos nombres… Es sencillo, el truco ya lo inventaron los bancos: me dejais la pasta en uno mas uno difuso, y al final el que figuro en los créditos, agradecimientos y demás, soy yo con mis siglas. Para lo bueno, que pa lo malo siempre habrá muchos a repartir.

Después, está el madridismo descarao que destila. Se sale del coto y tó. Hasta tal punto de que en algunas de las noticias concernientes ya a otro club (o SAD), figuran jugadores o entrenadores ex_madridistas sentando cátedra. Opinando o marcando camino. Cuando no mete algún mirlo un jugador con pasado chamartinero, que entonces, indisimuladamente, te cuentan la milonga de que tu equipo en cuestión poco menos es lo que es gracias al fulano. Allí tiene su harén el del villarato. Aquél que se colaba en el Metropolitano en tiempos de roña en el monedero para ver a un Atleti parecidísimo en títulos, ambición y señorío a este en el que sirve de gacetillero epistolar para culpables de estafa en apuros. Sí, ese tipo que se agarra el mentón en plan intelectual, y que comenta en la TVE en un amistoso pre-europeo de Selecciones con final en el Prater: “ya vale con pedir a Raúl, la Selección está cerrada y no hay debate”; en tanto, a esa misma hora, en ese mismo momento, “su” página digital abre con un Luis cabizbajo, sobre la leyenda “¡¡Raúl, selección!!”. Sí, ese, es uno de los “gurús” del Fútbol patrio. O intenta serlo. Junto con tantos otros… ¿Nadie tiene un filvit a mano?

Y barcelonitis. Mucha barcelonitis. En un sinfín de comparativas, bastantes de ellas propias de maternales con selectividá a párvulos, donde el sempiterno maltrado club de Chamartín, sale jodío. Y uno, que se acuerda de tiempos de álvarez margüenda, urío, guruceta y demás jarcia… Cuando a los del Atleti nos llamaban “llorones”, simplemente por pedir una igualdá que no se daba ni de roce. Ahora, lo quieren llamar “justicia”. Con una pléyade de cabos escribientes siguiendo la tiza de la línea editorial pa, demostrando el principio de que millones de moscas no pueden estar equivocadas al escoger el zurullo, hacer avispero en torno a una lesión que ellos mismos vinieron practicando con notable éxito desde tiempos inmemoriales: el trampeo. Los favoritismos. El pez grande, y el chico. Si no fuera porque el Barça me sigue cayendo mal, como cualquier adversario de enjundia (hasta que magil termine la obra con el tiro de gracia), casi que de me descojonaría vivo. Por eso, aunque no haya nacido allí, yo también soy un poco de Castilla y Lyon.

Y nada de los giles.
Égida mil veces maldita, en la que todos nuestros enemigos crecieron, mientras el Atleti, el del Atleti, mengua. Se queda en un gran jugador o dos con fecha de caducidá cada verano, una orgía por una final cada 10 años y una media de a 25 puntos del campeón de Liga de turno. Y cada vez menos crios en las aulas, soportando la rabia de no poder decirle en una década al repelente compañero de pupitre: “os hemos pulío, majete”. Como tuvieron que soportar en los recreos, incluso en las universidades, gran parte de los cabos escribientes del nacionalmadridismo actual.

Del barco de Chanquete, ya nos han movio. Aunque sigamos cantando con más o menos afonía. Pero tendreis al menos que escuchar como alguna vocecilla se cisca en vuestra bendita genealogía. De los culpables y de los encubridores. Mamones.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Entre paréntesis

Bueno, pues ya está aquí. Parecía como una cosa que le podía tocar a otros y, claro, como el frío se pasa en otros culetes, pues ¿pa qué vamos a pedir cojines?. Cojones. Pero ha venido. El lunes, ese felón con disfraz de despertador y ojeras, nos trae otra “alegría” de por medio: el Fútbol. O esa válvula de escape, acotada en versión Liga para los fines de semana, donde echar unas birras, unos bocatas y unas chácharas, mezcladas explosivamente con la señora madre de un árbitro, la genealogía de un cancerbero, los parabienes futboleros de un platense o el derrochando coraje y corazón de un canterano. Pues eso, que ahora también nos visita en lunes. Aunque en realidad, podía hacerlo en viernes; da igual. Tampoco diríamos ni mú. Y es que, hay que ver lo bien que nos organizan los gerifaltes de la política y el Fútbol patrio, copón. Esos virreyes que desde la LFP , la FEF , la AFE o la ATPC , nos recolocan en estadios a granel con el simpar objetivo de dar gusto y fruición a las cadenas televisivas que, cuales “audiencius máximas”, crecen como hongos a los pies de pinos y mojones. Volviendo loco al espectador, que no sabe muy bien si acogerse al paquete A, al B o directamente al del vecino, si se tercia entre armario, armario y salida. ¡Ya están aquí!, como esos monstruitos de butaca y linterna de acomodador, que nunca creías que iban a trincar de la misma bolsa de palomitas que tú mismo sujetabas.

¡Lavirgen, que susto!... Pues oiga usted, que es que yo este lunes salgo tarde del trabajo. O me viene a desmano eso de zamparme y pico cientas yardas hispanas, pa llegar al Calderón desde mi pueblo, que como sabe su señoría es el Quinto Pino. Además, no estoy seguro ni de que salga el autocar de la peña… Pero, ¡qué coño!, si esto no lo ponía ni en la letra pequeña del abono cuando lo renové: ¡hay Fútbol los lunes!. Digo yo, que si habrá algún abogao por la sala, y con muy mala hostia encima, como aquél del Cabo del Miedo. Nombre de cabo, por cierto, que se nos ha quedao muy pegao al cuerpo. Casi que se nos acaban por ver los galones en el jerón. Debajo de la nuez. Donde suben los testículos, cuando el pavor encoge el alma. Parece mentira que podamos apretarnos con solvencia un chuletón de Ávila, con ese gaznate tan aprisionao siempre por el Miedo. De cabo a rabo. Miedos. A perder lo que ni siquiera nosotros mismos conquistamos. Muchos miedos a sonar alguna vez como uno grande, libre y jodido. Uniendonos todos en la lucha final, semifinal o de cuartos de final. Pero lucha. Sacudiendo en la puerta del Cabo del Miedo, todos los idems que nos abocan a caminar cada vez más anchos de espalda y estrechos de culo. En una u otra vereda de la vida; sea política o futbolera, de la diestra o la siniestra. Nuestros miedos, nuestras rencillas, son el alimento de los aprovechaos. De los listillos. De los tiranos. De los avaros…

Así es que, como nos han naturalizao el jugar los lunes la Liga con dos artículos por el lao externo, y una de “no me muevo porque no es ni medio bueno pa la hernia” por el interno, tendremos lo que ese conglomerao de letras mayúsculas seguidas de números pares o impares desean: que les dejemos los jurdeles espaciadamente, y no los solapemos los descodificadores de Valencia con los de Madrid, y estos con los catalanes. Pasen por taquilla ordenadamente, señores. Sigan entregandonos el poder de decisión sobre su deporte, otrora popular y de las masas de aficionados y practicantes, que nosotros sabremos administrarlo en clave de ibex 35, teletienda, apuestas varias y un sinfín de opacos mercadeos que suelen dar como resultado mucha deuda y poco título. Que menudos somos nos pa los dineros...Pasen , señoras y señoras, niños y niñas; los muertos no pagan y los invidentes la mitá. Pasen a este circo de cuatro espabilaos en siglas organizadas, mientras cientos de miles no se organizan más que el barco del arroz. Que una de batusis en el Mercadona. Huérfanos de sindicato. Huérfanos de voz. De voto. Pasen a esta Estrella de la Muerte en mitá de vuestra bendita democracia, donde los aspirantes a tirano podemos ejercer con total impunidad y aquiescencia nuestra verdadera vocación. Como en un mundo paralelo, donde los ovejos del matrix político, acaban convietiendose en corderillos lechales aquí, en esta otra realidad virtual futbolística. Y ya vereis más adelante nuestro producto estrella: el Fútbol after-auer pa que nos sintonicen los chinos...
Os jodeis, haber estudiao. Cuando estabais a tiempo…

Corred, corred, jodíos, porque la carrera os dará una sublime impresión de libertad. Ese viento en el rostro. Ese torso desnudo. Y esas veloces piernas entre paréntesis.